El aeropuerto de Barcelona-El Prat vive un momento dulce. La infraestructura, básica para el tejido industrial y para el sector turístico, cerró el 2016 batiendo su récord de pasajeros: durante todo el ejercicio pasaron por la instalación 44,1 millones de viajeros, lo que supone un crecimiento del 11,2% respecto del anterior récord, logrado un año antes. De esta forma, El Prat logra por primera vez superar -y de forma holgada- la barrera de 40 millones de usuarios anuales, cerrando el séptimo año consecutivo de aumento de viajeros. Y lo ha logrado gracias a un muy buen diciembre: pese a que se trata de temporada de invierno, en el último mes del año pasaron por la instalación tres millones de viajeros, lo que supone un incremento del 15,3% respecto de un año antes.
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