El Mundial arranca el próximo 12 de junio pero, los aeropuertos de las 12 sedes todavía no están listos al 100%. Las autoridades brasileñas corren contra el reloj para llegar a la cita mientras intentan explicar retrasos incomprensibles para la mayoría de la población e insisten en que el objetivo de las obras no es llegar a tiempo a la Copa del Mundo, sino dejar un valioso legado a los brasileños. En esta línea, la presidenta Dilma Rousseff asegura que los proyectos de ampliación de 270 aeropuertos no fueron motivados por el Mundial, aunque en 2012 el Gobierno anunció estas obras como de esta manera.
Lea la información completa en El País.