La Asociación Profesional de Controladores de Tránsito Aéreo se muestra satisfecha con las sentencias que, junto a dos más resueltas con anterioridad en el mismo sentido, suponen un importante paso a favor de la seguridad aérea.
El Juzgado Número 3 de Santiago de Compostela ha emitido varias sentencias que anulan las sanciones impuestas por los anteriores gestores de Aena a tres controladores aéreos del Aeropuerto de Santiago que se habían negado a trabajar en una configuración de control no reglamentada, y que iba en contra de las normas básicas del control del tráfico aéreo. Para la Asociación Profesional de Controladores de Tránsito Aéreo (APROCTA), este fallo supone un importante paso a favor de la seguridad aérea.
Los hechos se remontan a noviembre de 2010, cuando en el TACC de Santiago se intentó obligar a varios controladores a prestar los servicios de control de aeródromo para el Aeropuerto de Santiago y de aproximación radar a los tres aeropuertos gallegos, cuando siempre se ha hecho de manera segregada y por parte de dos controladores diferentes. La negativa a trabajar en esas condiciones por parte de tres controladores se produjo por considerarlas contrarias a la seguridad y la legalidad vigente; motivo por el cual fueron sancionados por Aena.
En las sentencias se recuerda que mientras el servicio de control de torre es visual, el de control de aproximación radar se basa en mirar en todo momento a una pantalla del radar para evitar un incidente aéreo, por lo que precisa una atención exclusiva. Son dos puestos de trabajo distintos y no compatibles, que no pueden juntarse en uno solo.
Para APROCTA, la Administración de Justicia viene a ratificar que las condiciones que les quisieron imponer a cinco controladores de Santiago de Compostela eran contrarias a la Ley, y que la negativa de los controladores a realizar funciones de control de aeródromo y de aproximación radar de manera integrada está justificada por motivos de seguridad aérea y porque así, además, lo según establece la norma aeronáutica.
Estas sentencias se suman a otras dos más resueltas con anterioridad en el mismo sentido. Por todo ello, desde APROCTA se anima a todos los controladores a seguir trabajando con la profesionalidad que esta profesión exige para garantizar los máximos estándares de seguridad.