a nueva normativa española sobre aviones no tripulados abre el camino hacia una nueva manera de realizar las labores de vigilancia y seguimiento de los incendios en España. El uso de drones para realizar estas tareas supondría un ahorro de costes para la Administración Pública de más del 60% frente a su coste por hora de vuelo actual.
Asimismo, según la nueva normativa, estos aparatos sí podrán realizar vigilancia y seguimiento durante la noche si así fuera requerido. En la actualidad estas labores quedan suspendidas hasta el amanecer. Esas inestimables horas permitirán reducir notablemente el devastador efecto del fuego. Además, su uso supondría la eliminación del riesgo para las vidas humanas al tratarse de una aeronave sin piloto, controlada desde la estación de tierra.
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